APUNTES DESDE EL PUNTO DE VISTA CULTURAL I
CONSIDERACIONES GENERALES
Yo estaba diciendo, que, después
de todo, y cuando digo todo, me refiero a,
por lo menos, tomar en cuenta, masacres mineras, fundación del primer
sindicato campesino, pasando por la tesis de Pulacayo, fundación de la COB, la
caída del nacionalismo, de las dictaduras, 21060, marcha por la vida y octubre
de 2003, estábamos todos de acuerdo con que hasta aquí ya estaba bueno del asunto
y nos íbamos a dar un tiempito para pensar los lineamientos de nuestra
libertad. La libertad cuando menos dentro de ese corral que llamamos país y que
geográficamente está reconocido por todos los demás países que a su forma y
modo les succionan la vida a sus habitantes cuando no los habitantes a la madre
tierra, seríamos unos capos para elaborar nuestro Estatuto Autonómico. Pero
parece que no, no hemos aprendido casi nada.
Quien tenga un
tiempito, y eso sí hay que rescatar de la actitud de la Asamblea Departamental,
puede recoger un ejemplar gratuito de sus oficinas al frente del colegio
William Booth. Luego de dar una leidita liviana al documento quizá pueda
apreciar las siguientes cosas:
Con temor a
pecar de zonzo ignorante, hasta donde yo tengo entendido, las grandes ramas de
la filosofía del siglo XX se sitúan geográficamente en la antigua Unión
Soviética y China con el Marxismo, o Materialismo Histórico; toda la Europa no
socialista con la filosofía de café (Existencialismo, pragmatismo y otras) y
EEUU, que daba por resuelto el tema de la libertad con los fundadores y
redactores de su acta de independencia y cuyos intelectuales se acomodaron más
al estudio de la lingüística como problema filosófico (Incluido Noam Chomsky en
sus primeros años). No se toman en cuenta a Hindúes o Mahometanos porque
supuestamente están estancados en su religión, a pesar de que hubo un auge New
Age en los sesentas y setentas, y tampoco los países tercermundistas porque se
nos consideran pueblos jóvenes e ignorante.
En Latino
América, tuvimos la fuerza del Marxismo muy presente y al parecer una
incipiente cosecha de filósofos, que básicamente no son muy leídos y conocidos,
lo que nos da mucho para especular. Sin embargo una florcita exótica fue
abriéndose principalmente en nuestro país y ha dado fruto y semilla, el
indigenismo y el indianismo, que nos han dejado los pilares de la que hoy
conocemos como tronco de todo el lineamiento del proceso de cambio:
pluriculturalidad y descolonización, gracias a un largo transcurso de
investigación antropológica y social.
Ahora me
pregunto, con puro afán aristotélico confeso, ¿a cuál de todos estos modos de
pensar se acomoda el proyecto de Estatuto Autonómico?
¿Será un
Estatuto Marxista? No, pues si así fuera comenzaría por identificar los medios
materiales de la infraestructura para ascender dialécticamente hacia la súper
estructura y que tendría como fin ideológico el bien común a través de la
apropiación colectiva de tierra, industria y control de comercio.
¿Será un
Estatuto que protege sus capitales internos con un sistema de reinversión
pública en educación y cultura, que no son más que mecanismos de control social
para domesticar a la gente, como al parecer pasa en las Europas?, ¿o ha dado un
salto del derecho positivo a un nuevo paradigma que se adecue a las otras
ciencias que pasaron a constructivismos y otros post modernismos? Pues NO.
¿Será un
Estatuto basado en principios elementales y acumulación de tradiciones jurídico
administrativas, aplicadas a casos concretos como en Estados Unidos? Tampoco.
¿Será un
Estatuto que quiere volver a la sabiduría de los pueblos antiguos agregando
elementos de la ciencia contemporánea sin necesidad de avergonzarse o perder
sus tradiciones y dogmas fundamentales como los pueblos del lejano Oriente? Ni
aunque el Dalai Lama lo recomiende. No es nuestro caso.
¿Será un
Estatuto descolonizador basado en el querer, hacer, saber y poder, en lógica cíclica
con rotación de responsabilidades? ¿Será novedoso, lleno de amor y fiel a su
filosofía ancestral como lo demuestra el art. 1 del Estatuto Autonómico de la
Nación Originaria Uru, que de entrada declara su amor a la Madre Tierra y la
dependencia del ser humano a ella? Pues, señoras y señores, penosamente NO.
¿Cómo podemos
entonces clasificar nuestro Proyecto de Estatuto, sí es un heredero de los
códigos Banzer en su forma y estructura, si es básicamente una repetición del
modo de hacer y pensar las cosas de hace más de veinte años a la fecha; y que
en lugar de buscar la simplificación del problemático embrollo jurídico se
atasca en el enseñoreado todopoderoso proceso de cambio que lo puede todo; olvidando que el Código penal más
perfecto del mundo haya sido tan fácil como decir Ama suwa, Ama Llulla y Ama Qhella;
manteniendo la estructura triangular piramidal que fomenta militarismo y
dependencia de poder sobre un pueblo con mentalidad cíclica y valores distintos
al enlatado sistema de cosas tan neoliberal como cualquier otro? Podemos decir
que este Estatuto es un mamarracho anacrónico.
Porque se
aferra a la maquinaria burocrática colonial que tanto se critica en el discurso
y que no sirve más que para dar orgasmos múltiples a asesores, analistas y
verborréicos; y producir MIERDA, MIERDA, MIERDA Y NADA MÁS QUE MIERDA. Porque
no nos ofrece nada nuevo, ES EL ESTATUTO DEL BUEY QUE AMA Y ADORA EL YUGO,
PORQUE ES EL ESTATUTO DEL ASNO QUE LAME HASTA EL PAROXISMO DEL PLACER EL
LÁTIGO, PORQUE ES EL ESTATUTO DEL AVE QUE EN EL DÍA EN QUE SE ABRIÓ LA PUERTA
PREFIRIÓ LA JAULA. Y nosotros pobres hijos de esta Tierra, cargaremos con la
pesada cruz de quedar en ridículo frente al futuro, porque cuando se nos dio la
libertad de pensar por nosotros mismos, no pudimos y no quisimos ser nada más
que esto que no somos, esto que heredamos y, lo peor, esto que dejaremos para
el futuro.
SERGIO GARECA
almaeninvierno@yahoo.es