miércoles, 2 de diciembre de 2015

UN TEMA DE TANGUITO, último adiós a ANDRÉS WYMAN

“Ah, sólo quiero viajar no sé dónde iré
sólo puedo, puedo divagar
porque lo demás está prohibido
Yeah Oh, yeah
Camino por el sueño,
extasiarme en sueños,
soñar despierto.
Hoy sólo quiero estar conmigo,
tres puntos suspensivos.
Quiero decir tantas cosas
pero de qué sirve,
si un dormido les habla a otros,
a otros dormidos,
sólo para que sueñen mejor.
Y nuevamente en la ruta,
ruta de mis sueños,
comenzaré a hacer uso
uso de mi dedo, de mi idea.
Yeah Oh, yeaaaaah.

(Tanguito)
Les debo mucho a mis amigos, a nuestras charlas, a nuestras experiencias de vida. La penosa muerte de nuestro hermano  Andrés, nos mantiene en la intriga. Pero la claridad de su vida nos ilumina lo suficiente como para dedicarle unas últimas líneas.
Naufragando, por la pampa, y por las ideas llegó a estas tierras, directamente a agruparse con la Orquesta Sinfónica Juvenil de Oruro, para de ahí saltar a hacer teatro en Ciudadano 10, que es donde nos conocimos. En ese tiempo yo padecía una vejez prematura y la preencia de Andrés, de Gabriela Bellot, de Eliana Calderón, Abril Ordoñez, Moisés Ledezma, Alejandro Valdez, Daniel y Paty Rodas y Narel Campero, le inyectaron a mi transito muchas ganas de vivir, de acontecer en el mundo, donde también Andrés no hallaba lugar. Rockero e izquierdoso, no tuvo temor de pensar a contracorriente y tratar de eludir una vida convencional, pues no le ofrecía nada. Recuerdo que le gustaba en particular la tira de Mafalda donde Miguelito se pregunta si para ser oso, solo se necesita ser oso, o para ser conejo solo se necesita ser conejo, ¿por qué el ser humano tiene que ser abogado, médico o ingeniero? Dudaba mucho del convencionalismo y creo que esto le provocó un profundo vacío que solo la música podía llenar. Penosamente se llevó varias composiciones. Pero nos dejó en nuestro trabajo conjunto los filmes: “Dentro”, “Conmigo” y nuestra malquerida y poco vista “Narconovia”. A él también le debo mi cuento “El día que no hubo carnaval”, cuyas primeras ideas nos salieron de un puchito y el aburrimiento.
El aburrimiento también fue un naufragio, la facultad o la supervivencia . Ahora como en un tema de Tanguito, o como Tanguito mismo, (y otro temita de Mago) a la vera de los rieles, encuentro la imagen de nuestro amigo, ya libre de este mundo absurdo, solo y triste en este mundo abandonado, a punto de irse al lugar que él más quiera.
“y cuando mi balsa esté lista,
partiré hacia la locura”     
Desde nuestra locura y hasta que el cuerpo aguante, chau Andrés.

SERGIO GARECA, 2015
 
* aqui un enlace sobre la trascámara del filme CONMIGO
 
https://youtu.be/0OReodZsnio

No hay comentarios:

Publicar un comentario